¿Qué mochila me compro?

Esta es una de las preguntas que pueden hacerse cualquier persona novel en el mundo de los scouts, todos al principio no hemos sabido que mochila comprar y de cuantos litros(es la forma de medir la capacidad). La intención de este articulo es ayudaros en vuestra elección, siendo siempre la mejor con el menor precio, aunque después en cada tienda os podrán realizar otras recomendaciones ya que es un producto que continuamente van cambiando, por ello que no recomendemos un modelo o marca concreto.

Unos consejos importantes antes de empezar

Ya que existen tanto modelos y marcas, nuestras recomendaciones siempre van orientadas a nuestra experiencia y en conocimiento del tipo de actividades que se van a realizar, esto no quita que puedan haber excepciones y posiblemente otros usos fuera del marco sobre el que os hablamos.

La elección de la mochila podemos decir que sucede dos veces en la vida de un scout, cuando esta en las ramas inferiores y cuando pasa a las ramas superiores, nos referimos a que la mochila que le puede ir bien a un Castos o Lobato, posiblemente a un Scout le pueda ir aun bien, pero posiblemente el Esculta o Pionero y Rover ya no sea la mochila mas adecuada, por capacidad, ergonomía y diseño general(hablamos en términos funcionales). Por lo que antes de lanzarnos a ver el amplio catalogo de mochilas tengamos claros los siguientes tres puntos:

  • Primero buscaremos las mochilas adecuadas para la edad (una mala elección puede provocar lesiones de espalda, hombros,…), cada vez mas hay mas marcas que diferencian las mochilas juveniles de las de adulto, ya que los elementos que asegurar que nuestra espalda sufra lo menos posible se ubican de forma diferente, en estos casos nos referimos a mochilas grandes, no a las de un día de marcha.

  • Segundo determinaremos la actividad que vamos a realizar (duración, mayor o menor tecnicidad, etc), no es lo mismo plantearnos una mochila para una marcha en la que llevaremos algo de comida, abrigo y cuatro cosas mas, que la mochila que pueda ir a un campamento de 5 días o uno de 10 días

  • Finalmente, elegiremos la mochila más adecuada sin dejarnos llevar por “adornos tecnológicos”, con ello nos referimos a que la mochila debe ajustarse a la espalda de quien la vaya a utilizar, tiene que resultar cómoda y huyamos de sistemas que prometen cargar grandes pesos con esfuerzos ridículos. Esto nos ayudará a ahorrarnos dinero en la compra del material.

Las actividades que vamos a realizar no van ha ser necesariamente con la mochila todo el tiempo al hombro, pero si puede darse la circunstancias que tengan que cargar con ellas desde donde nos deje el transporte hasta donde vayamos a dormir, realizar la acampada o la actividad que sea. En ello influye que la mochila que lleve tendrá que llevarlo la persona en si, con todo el contenido que haya decidido meter y si la mochila que lleva no es la mas adecuada puede llevarse una mala experiencia, teniendo que dejar dicha mochila y volver a gastar en una nueva.

De esto puede deducirse que UNA MOCHILA PARA TODO NO EXISTE. Ya que no tendremos que cargar el mismo peso en una marcha de un día que en un campamento itinerante de 5 días. Pudiendo necesitarse una mochila para cada tipo de actividad. Pero no llegando a la necesidad de tener que comprar mochilas técnicas, puesto que no vamos a realizar ascensiones digamos.. a los Alpes. Una mochila de cualquier tienda deportiva que tenga material de acampada suelen tener lo mínimo que se requiere para nuestras actividades y sino siempre queda la opción de regalarle complementos para la misma, como un chubasquero por si nos pilla la lluvia en un campamento volante(esto seria en las secciones de Esculta o Pioners y Rovers).

Algo parecido ocurre con el peso. Al elegir una mochila, hay que intentar que la mochila sea lo más ligera posible, pero si esto afecta al diseño de cinturón lumbar, respaldo y tirantes, es contraproducente: el peso en una mochila de carga bien diseñada se distribuye y se “siente” mucho menos; el peso en una mochila mal diseñada, o en la que por su ligereza se ha escatimado en el cinturón lumbar y tirantes, se “sentirá más”, nos desequilibrará, y al final nos parecerá que llevamos más peso que en la otra. Cada gramo cuenta, pero el peso tiene que disminuir por ligereza de materiales, etc, no por recortes estructurales.

1. Partes de la estructura de una mochila

Las 3 fundamentales son el cinturón lumbar (o pélvico), el respaldo, y los tirantes. Por este orden. Pero recordemos que siendo elementos que nos pueden ayudar a que la carga sea mas cómoda, también pueden encarecer el precio, por lo que debemos buscar un equilibrio del mismo.

1.1. El cinturón lumbar

De forma errónea, muchas personas piensan que la carga de una mochila se sostiene sobre los hombros. No es así: al menos entre el 75 y el 85 por ciento de la misma debe recaer en el cinturón.

Por eso su diseño tiene que adaptarse muy bien a nuestra anatomía, y no debe escatimarse en su construcción. Un cinturón de poca sujeción, o que no ajuste como debe, nos hará cansarnos mucho más, perderemos seguridad, equilibrio, y nuestra espalda sufrirá innecesariamente.

Las mochilas muy pequeñas, prescinden del cinturón porque están preparadas para llevar apenas 2-3 kilos y no es necesario. Pero no debemos cargarlas más, porque no están preparadas para ello.

1.2. Tirantes

Tienen que ser anatómicos, adaptándose a nuestro cuerpo.

Con los nuevos diseños, y con los nuevos materiales de alta densidad, se ha conseguido la misma comodidad con menor volumen que el de las mochilas antiguas. De esta forma, los tirantes no impiden los movimientos más atléticos. Normalmente, cuánta mayor sea la capacidad de la mochila (y por tanto, el peso que puede acarrearse con ella), más acolchados y voluminosos serán.

1.3. Respaldo y bastidor

Es fundamental. También cumple su función de sujeción de carga, así como de comodidad y protección. Aporta la rigidez necesaria al sistema para que la carga no se mueva y la mochila sea firme, además de proteger nuestra espalda tanto sujetándola como evitando que los objetos se claven en ella. Muchos modelos incorporan un bastidor rígido.

Uno de los problemas tradicionales de los respaldos radica en el calor y sudor que provocan. Los diseños aireados de los últimos tiempos minimizan este problema, ya que todas las mochilas de calidad incorporan canales de ventilación y están confeccionadas con materiales que absorben el sudor.

El óptimo se consigue con los modelos con espacio tras el respaldo, sistema que inventó Deuter con su Aircontact, y que también podemos encontrar en Lowe Alpine (Airzone) y otras marcas, que separan la espalda de la mochila, evitando totalmente el contacto y permitiendo la completa circulación de aire.

2. Factores anatómicos para la elección de mochila

Aunque nos hemos pasado años comprando mochilas para el colegio y nunca nos hemos planteado esto, solo que entraran todos los materiales que le pedían los profesores

2.1. Talla

Conociendo la importancia de que el diseño del cinturón lumbar, los tirantes y el respaldo ajusten perfectamente a nuestra anatomía, es lógico pensar que no todas las mochilas encajarán igual en todos los cuerpos, y que por tanto habrá tallas. Cuando hablamos de tallas, no hablamos de la capacidad y volumen de carga de la mochila, sino de la anatomía del respaldo.

La talla, normalmente, se refiere a la longitud de la espalda, pero afecta proporcionalmente a la anchura y, lo que es más importante, a la longitud del cinturón lumbar. A la hora de elegir la mochila no basta conque podamos conectar la cinta de enganche del cinturón -que es muy extensible, por lo que en la mayoría de los casos lo hará-; tendremos que estar seguros que el cinturón lumbar nos envuelve adecuadamente, cumpliendo su función.

No todas las mochilas tienen talla: es probable que no la encontremos en las de menos de 30 litros; en algunas muy técnicas, mientras que en las de mayor capacidad de carga, en algunos casos encontraremos respaldos de mochila regulables que permiten ser adaptados a las diferentes tallas.

De ahí que en lineas mas arriba hayamos hecho inca pie en que probablemente a lo largo de la vida de un scout acabe usando dos mochilas, siendo la primera en las secciones menores y posteriormente una nueva en las secciones mayores.

2.2. Hombre / mujer

Puesto que buena parte de la carga recae sobre el cinturón lumbar, que tiene que envolver muy bien nuestra anatomía, las marcas fabrican modelos de mujer y de hombre.

Las principales diferencias entre ambos son:

  • El cinturón lumbar, en los modelos para mujer, suele ser algo más ancho y tiene un cierto ángulo para que apoye naturalmente en las caderas más curvadas.

  • Los tirantes se desplazan de forma más oblicua, de forma que evitan el pecho.

  • Suelen ser algo más cortas, ya que habitualmente en la anatomía femenina la cadera está situada más alta.

3. Mochilas según su capacidad

Como hemos explicado al principio, la capacidad depende de la actividad y el material que necesitemos cargar.

  • Menos de 20 litros: salvo cuestiones específicas (trail running, etc.), podremos usarlas para senderismo de verano, etc, ya que su capacidad de carga es muy pequeña. Pueden no llevar cinturón, ya que cabe muy poco peso en ellas. Aquí también incluimos las Daypack o mochilas del colegio, que son mochilas que combinan el uso urbano con las salidas cortas de día en montaña. Como también son muy útiles como equipaje de mano, etc, son muy útiles y polivalentes.

  • 20-35 litros: Adecuadas para salidas de día, especialmente en estaciones en las que no hay que cargar con excesiva ropa de abrigo. Son las mochilas de día polivalentes por antonomasia. El cinturón es ligero, ya que la carga que soportamos es aún poca.

  • 40-65 litros: Son las mochilas más usadas. El cinturón empieza a ser importante. Bien aprovechadas, históricamente servían para actividades con noche, o travesías largas si son por refugios y no necesitamos llevar un saco de dormir grueso, etc.

    ¿Por qué decimos históricamente? Porque en los últimos años, con los avances en material, que han afectado y mucho al volumen y peso del mismo, este tipo de mochilas, sobre todo las más cercanas a 50-55-60 litros, son perfectamente capaces de llevar sacos de dormir de buena capacidad calorífica, hornillos, ropa de abrigo, etc. Por ejemplo, un hornillo con menaje actual puede ocupar y pesar menos de 1 cuarta parte que hace 2 décadas. Y lo mismo con los sacos, tiendas y ropa ultraligera, etc. Así que, en este momento, son las más usadas para cualquier tipo de travesía. Con ello no queremos decir que haya que comprar dichos materiales, ya que suelen tener precios elevados, en el caso de ser una persona que le guste el mundo scout en un momento determinado si puede ser un buen regalo, pero no como compra primeriza para probar.

    Muy polivalentes. Aunque no sean específicas para ello, nos serviría, ajustando las cinchas al volumen interior¹, para salidas de 1 día, y son buenas para la gran mayoría del resto de actividades.

    ¹Es fundamental el uso de las cintas laterales de compresión en cualquier mochila. De esa manera adaptamos la capacidad a la cantidad de carga que llevamos, evitando que se mueva y nos desequilibre. De esta manera, podemos llevar con seguridad una mochila a media carga.

  • Más de 65 litros: Son las mochilas de carga. Pueden ser de hasta 100 litros. Para grandes travesías, aproximaciones a campo base, etc. Sus respaldos, bastidores y cinturones lumbares están sobredimensionados, y permiten llevar la carga con comodidad y minimizar la sensación de peso.

    Como decíamos, hace unos años eran las usadas en travesías de varios días en autosuficiencia, pero hoy en día, en muchos casos, con una mochila entre 45-65 litros podremos arreglarnos…aunque en otros no. No olvidemos tener siempre en cuenta la regla general: elegiremos las mochilas entre 45-65 litros para travesías si cabe todo lo que necesitamos; sino, una de carga. Nunca abandonar cosas necesarias por el volumen de la mochila…y nunca cargar con más cosas de las necesarias porque aún tengamos sitio en ella.

4. Complementos de la mochila

Dependiendo de uso, las mochilas tendrán más o menos complementos. En los dos extremos tenemos las de senderismo puro, que quizás apenas incorporen unos portabastones, y las más técnicas con numerosos accesorios.

Si bien es conveniente no comprar una mochila con multitud de cosas que no vamos a emplear (porque eso supone cintas colgando que pueden engancharse, etc), la mayoría de mochilas de trekking y montañismo son un buen compromiso que nos servirá en casi todas las situaciones menos técnicas que vivamos ahora y en un futuro (portapiolets, portabastones, daisychains para material, etc.).

  • Portapiolets

  • Portabastones

  • Portaesquís

  • Portacuerda

  • Portacasco

  • Portasonda
  • Portapala

  • Portamateriales (DaisyChains, anillas)

  • Portacrampones

  • Porta GPS y cámara en tirantes y otros enganches

  • Cubremochilas

Parte de este articulo se ha sacado de: www.barrabes.com